Un nuevo documento del Comité Fronterizo de Obreras (CFO), contraparte desde hace mucho tiempo de la RSM, describe las experiencias de trabajadoras(es) en la maquila de los estados del norte de México durante el primer mes de la crisis de COVID-19.
El documento presenta una situación difícil para las trabajadoras(es), quienes se ven forzadas a suspensiones recibiendo una parte de sus salarios, o continuar trabajando en condiciones inseguras, y con alto riesgo de contagiarse el virus. El CFO también describe el crecimiento de violencia doméstica en los hogares de trabajadoras producto del aislamiento, y consecuencias como la falta de acceso a alimentos básicos más baratos que ha producido el cierre de la frontera con Estados Unidos en la comunidad en general.