El 24 de abril de 2013, el colapso del edificio Rana Plaza en Dhaka, Bangladesh, resultó en la muerte de 1.134 trabajadoras(es) y dejó aproximadamente 2.500 personas lesionadas. El edificio alojaba cinco fábricas de ropa. El colapso ha sido calificado como el peor desastre industrial en la historia de la industria de la confección de Bangladesh. Sin embargo, no fue un accidente; las trabajadoras(es) sabían que el edificio era inseguro, pero se les obligaba a trabajar en estas instalaciones para cumplir con las fechas de entrega de las marcas internacionales.